La
ceremonia, prevista el próximo 25 de marzo en Fukushima y a la que inicialmente
iban a asistir 3.000 personas, tendrá lugar sin espectadores, según el diario
japonés Yomiuri, aunque en el recorrido de la antorcha se permitirá su
presencia.
La ceremonia que marcará el inicio del relevo de la antorcha de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 se llevará a cabo sin espectadores, aunque luego el público podrá asistir al recorrido en sí, informó este martes el diario japonés Yomiuri.
El
Comité Organizador de los Juegos Olímpicos de Tokio anunció a finales de
febrero las estrictas reglas que deberán observar quienes deseen ver pasar la
llama, incluida la prohibición de animar y el uso obligatorio de una
mascarilla.
La
presencia en determinados puntos del recorrido se hará únicamente con reserva y
la información relativa a los portadores de la llama se comunicará sólo en el
último momento para evitar un público agrupado, siempre de acuerdo con estas
directivas. Ciertos tramos del relevo también podrían cancelarse para evitar el
riesgo de transmisión del coronavirus, habían especificado además los
organizadores.
Los
Juegos Olímpicos de Tokio, aplazados el año pasado por la pandemia, están
programados entre el 23 de julio y el 8 de agosto, a pesar de la persistencia
de la crisis sanitaria en el mundo.
La
delicada cuestión de permitir o no la presencia de espectadores extranjeros
durante el evento debe decidirse a finales de marzo, aunque los organizadores
están a favor de su prohibición, según medios locales.
La
decisión sobre la capacidad máxima de las sedes olímpicas también se anunciará
en abril.
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